Obras de Evelyn de Morgan
Cuentan de un capellán que,
en plena batalla,
se acercó a un herido
y le preguntó si deseaba que le leyera
La Biblia.
El soldado le dijo que tenía sed,
hambre y frío.
Cuando el prelado le ofreció los restos
que quedaban en su cantimplora
y su mochila
despojándose también de su gabán de campaña,
volvió a preguntarle:
"Y ahora?"
El moribundo le respondió:
"Ahora sí háblame de ese Dios
que te inclinó a darme tu último
trago de agua,
tu último mendrugo y la ropa
que te abrigaba.
Quiero conocerlo en su bondad.
***
No hacer nada no significa ser buena persona.
La bondad es movimiento,
tomar el teléfono y preguntar,
responder y permanecer,
velar y tomarse molestias,
todas las molestias necesarias.
Es ir y tocar el timbre
en la puerta que probablemente
no nos abrirán de inmediato.
Es la frase oportuna
en el momento adecuado.
Freud consideraba que la ciencia moderna
aún no había producido
un medicamento tranquilizante tan eficaz
como lo son unas pocas palabras
alentadoras.
Todo lo demás es puro cuento
y frases de autoayuda.
Miguel de Unamuno dijo:
"Todo acto de bondad
es la más grande demostración
del poderío humano"
Noemí Carrizo
Profesora de Letras,
periodista y escritora.