Entre los tantos rincones que esconde el CENTRAL PARK DE NEW YORK
uno de ellos estuvo literalmente oculto
durante años.
Hablamos de
HALLET NATURE SANCTUARY,
un área forestada al sudeste del parque que,
desde 1834,
funcionó como un santuario de aves y estuvo cerrada al público
hasta hace algunos meses.
Si bien en 2013 comenzaron a permitirse algunas visitas,
recién este año las extendieron al público en general.
Sin embargo,
para preservar las plantas nativas del lugar,
se controla la cantidad de gente
que ingresa y se mantiene cerrado los días de lluvia.