¿Por qué busco pasos en la acera...?
Tropezaré con un enorme silencio
de postigos cerrados
y una libertad de rejas cerradas.
Iré con los brazos abiertos
mirando mis huellas
de pasajera y víctima,
sin lástima.
Delante de mí:
las voces,
figuras que llegarán desde otro tiempo
a descansar
para desaparecer con las luces del alba.
Pasarán años de larga espera,
rostros entre alas de ángel;
yo abriré mis ojos demasiados sombríos
para ver a la desvalida niña
que llevo dentro.
Entre flores de tilo y risas
recordaré tus ojos de mirar sin nombre
próximos a cruzar las sombras,
hacia el azul de un cielo nuevo
perpetuo y cincelado
de arcas solitarias.
Luján