¿Qué pasaría si tu enamorado te construye un majestuoso castillo
en uno de los sitios más románticos del mundo.?
Lástima que George Bold, quien fuera propietario del prestigioso hotel
Waldorf Astoria de Nueva York,
nunca pudo descubrir cuál habría sido la reacción de su esposa Louise.
En 1900 mandó construir un señorial caserío
en un emplazamiento inigualable;
compró la isla Corazón,
las más especial por su forma de las que componen
"Las mil islas",
un archipiélago en el río San Lorenzo,
a ambos lados de la frontera entre Estados Unidos y Canadá.
Cuando los más de 300 albañiles, artesanos, carpinteros...
estaban trabajando en la construcción del idílico nido de amor,
la mujer de Bold murió repentinamente.
Abatido,
el millonario ordenó cesar las obras de inmediato,
y nunca más pisó la isla.
La propiedad quedó abandonada y a medio hacer hasta 1977,
cuando las autoridades adquirieron el castillo
para visitas turísticas.
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