Con su madre Dora |
La infancia y la juventud de Mario Vargas Llosa no fue fácil. Los padres se separaron y su madre Dora le hizo creer que su padre había fallecido, una mentira que el niño creyó hasta los diez años.
De todos modos, la relación con su madre no fue buena porque menospreciaba el oficio de escritor y Mario, entonces, tuvo que buscar consuelo y apoyo en la tía Julia; de allí su famoso libro "La tía Julia y el escribidor".
A veces, la literatura puede convertirse en un cauce a través del cual expresar esas malas relaciones. La novela de David Vann, "Tierra", publicada en Mondadori, es el reflejo de la rabia que el autor sentía hacia su madre.
***