Solía viajar en tren en algunos inviernos,
veía los campos desnudos y los tejados blancos.
Las chimeneas parecían envejecidas por la bruma
cuando el día tomaba su fotografía.
Eran las estaciones del alma
que escribían su historia.
Luján Fraix
¡Y yo te amo, invierno! Yo te imagino viejo, yo te imagino sabio, con un divino cuerpo de mármol palpitante que arrastra como un manto regio el peso del Tiempo...Invierno, yo te amo y soy la primavera...Yo sonrojo, tú nievas: tú porque todo sabes, yo porque todo sueño...
Delmira Agustini