La iglesia de Tenaún es hermosa y es de color azul, la oración escrita con letra cursiva, trazada con esmero, está en el reverso de un dibujo preciso, exacto, aniñado del templo de madera que se levanta en uno de los extremos de la calle principal del poblado que fundaron los conquistadores españoles liderados por Martín Ruiz de Gamboa en 1567 y que se mantiene en pie por obra y gracia divina a pesar de la inclemencia del clima, las lluvias, el frío que azota al archipiélago de Chiloé, en el profundo sur Chileno.
La iglesia es bella y azul, fue construida en 1845 y su patrona es Nuestra Señora del Patrocinio. Tiene tres torres, acaso por los tres cerros que tiene a sus espaldas, lo que la hace distinta de las más de 400 iglesias que hay esparcidas por el archipiélago y de las que 16 fueron declaradas Patrimonio Histórico de la Humanidad por la Unesco.
Las paredes son de madera de ciprés, mañío, canelo y avellano, revestidas con tejuelas, como la mayoría de las casas de la isla, que también están pintadas de colores vivos.
"Hay largas temporadas en que el cielo está gris, nublado,
oscurece temprano, llueve,
llueve mucho en la isla, a veces al mediodía se pone lindo
y a la tarde vuelve el agua.
Por eso pintan las casas de colores,
para combatir la melancolía que naturalmente impone
un clima tan hostil,
y es hermoso que sea así."