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Channel: Luján Fraix
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"La Dama que llora. . ."

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-Mira qué ocurrencia… venir…-dijo Magdalena completamente furiosa ante la llegada intempestiva de su refinada familia.
-Hija, felicidades…
-Gracias, pero no tenían que molestarse… yo…
-Nada… Dile a tu marido que se apure con los negocios que se le viene la noche.-dijo José Shalli con ironía.
-Papá, usted no se preocupe, esto es lo que yo elegí…
-¡Sin mi consentimiento!.
-Bueno, cálmese-dijo Magdalena con un miedo terrible de que Juan escuchara la conversación. Él, detrás de la puerta, ya había oído esas palabras que le provocaron un intenso dolor en el pecho.
Juan se consideraba condenado a la discriminación por un suegro que también había comenzado de la nada; sin embargo, no conservaba un poco de humildad frente a quienes no tenían el mismo talento o capacidad para superarse en corto tiempo. Él se encerraba en ciertos mandatos institucionales, estaba subordinado a pautas establecidas y rígidas que se inclinaban hacia conductas generales. El dinero era el principio y el fin de todo contenido y la vida giraba alrededor del éxito económico. Con esos ejemplos educó a sus hijas que eran su espejo porque no conocían otra forma de relacionarse con los demás; eran exigentes y materialistas, testigos y protagonistas de un presente que no admitía un futuro de carencias. Ellas, en el fondo, lo sabían por eso se rebelaban, por la furia que les ocasionaba no por poder ver más allá… Estaban obligadas al triunfo de las ideas que edificaban en falta con la realidad. En el espacio sideral eran solamente minúsculas partículas de suelo estéril.

A Magdalena no le importaba tanto el dinero, pero sí había heredado el carácter de su padre. Estaba consagrada a un marido pensativo y ausente que remarcaba la pobreza y que no hacía nada para salir de ella y a una hija pequeña que amaba mucho, a pesar de que no sabía cómo demostrárselo porque dentro de su alma se libraban demasiadas batallas. El polvo cuarteado y desértico de un territorio lacerado por una naturaleza que tenía la última palabra, le decía que estaba condenada a la muerte de sus sueños.

Continuará

Fragmento del primer capítulo
de mi novela:

"La Dama que llora..."

IBSN: Internet Blog Serial Number 16-11-1923-24




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