Buenas y Santas...
Los hijos olvidados
SANTA FE DE LA VERA CRUZ
La Candelaria, establecimiento rural de doña Emma: una mujer poderosa y autoritaria. La niña Felicitas, hija menor de la dueña de la estancia, es rebelde y trata de desafiar las leyes éticas y morales de una época donde los prejuicios sociales la obligan a guardar las apariencias. Un amor prohibido y su irrespetuoso carácter terminan por enfermar a su madre que toma una drástica decisión. Una tarde embarcan para Francia llevando como única compañía a Remedios, la criada.
Por aquellos años, las personas adineradas de Argentina solían viajar al hemisferio Norte para alejar a sus hijos de supuestos amores inoportunos.
Cuando regresan, después de dos años, están irreconocibles. Cada una oculta secretos inconfesables y la carga de un misterio demoledor que las separa... Serán enemigas de por vida. ¿Y los hijos olvidados?
La pobreza del alma, a veces, no tiene vuelta atrás.
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An He nació en 1957 en Guangzhou, China, en una familia de artistas. Se sintió atraído por las artes a una edad temprana, ya que se hallaba bajo la tutledge de su padre, un artista muy respetado y profesor de Arte de Guangzhou.
Estudió en la Escuela Superior de Bellas Artes de Guangzhou, una de las principales academias en China.
Mientras asistía a la academia, An fue invitado a unirse a la Asociación de Toda China Artista, una organización nacional superior sólo para los artistas profesionales. A la edad de 24, él fue el miembro más joven en ser elegido: su primer honor.
Ha ganado varios premios a la Excelencia Nacional de Arte de China.
An He se ha convertido en uno de los más buscados por sus pinturas románticas de mujeres. Su gran admiración y el respeto por las damas viene a través de toda su obra. Hay una gracia; una mirada en la belleza interior. Sus mujeres son generalmente atrapadas en un momento de contemplación, a veces en un interior opulento o en un jardín.
Temas del ballet e instrumentos musicales encuentran también su camino en sus composiciones. Sus pinturas son siempre impresionantes y atemporales.
Su estilo ha sido comparado con la obra de John Singer Sargent. También se ha especializado en el retrato, y ha sido comisionado por los coleccionistas de Estados Unidos, Europa y Asia.