Hoy voy a compartir este té con ustedes
y con los sueños que todos tenemos,
los que se nutren del pensamiento
buscando respuestas
en la vastedad de los secretos.
(esta imagen me la regaló Juan Carlos
un amigo de facebook porque sabe que me encantan
las tacitas de té)
Al ver estas pinturas de Thomas kinkade
imagino la casa de mis sueños
en una campiña inglesa,
rodeada de flores, de recuerdos queridos,
de plantas, y de gatos...
El portón a la felicidad...
Y dentro,
la candela encendida invitando a leer
cuando la lluvia callada me dice que es temprano
para esperar:
el beso eterno,
el amor postergado,
las voces...
y sentir que todavía es tiempo
de esperanzas,
de claroscuros milagros,
de ver una mano tendida
y de sentir el abrigo de un cariño.
***
Como agua,
como nieve,
como luz...
La magia vuela
y entrega su corazón niño
con la brillantez
de un cielo
que sabe que el alma
observa,
más allá de la razón,
la mirada de los sueños.
Luján 2013