Ésta es mi realidad queridos amigos,
tengo que tomar este té
para darle la bienvenida al invierno
mientras ustedes están gozando del calorcito
del verano.
A mí no me preocupa mucho,
siempre digo que hay que estar bien con nosotros mismos,
no importa si es primavera o invierno.
Todo pasa por nuestro ser interno.
De adolescente iba al colegio a las 7 y media de la mañana.
Mi padre quería llevarme en auto,
pero yo, rebelde como siempre,
me iba caminando como 5 cuadras
con un frío terrible.
Había señoras barriendo las veredas
y yo me preguntaba "tienen tiempo de sobra para hacerlo,
por qué no se levantan más tarde".
Yo siempre tuve mucho mundo interno,
no me preocupaba si hacía frío o calor
porque mi verdadera dicha estaba en los libros.
Igual he conocido algún amor en plenos fríos
cuando las miradas eran testigos
de algún hielo polar
que intentaba desbaratar las palabras.
Yo era consciente de mis fuegos internos
y no necesitaba más nada,
como hoy que mi felicidad...
no necesito ir a buscarla fuera de casa.
He sacado mi bufanda con flores crochet para abriagarme
de este gris de lluvia de hoy.
"Sólo el viento del alba
conoce el sendero del amor
y el contorno secreto
de las voces"
Me compré este saquito tejido al crochet para darle la bienvenida al invierno
de una conocida marca argentina
y quería mostrárselos porque sé que a muchas amigas les gusta
este tipo de diseños y de tejidos.
***
Feliz invierno y verano!!!
para todos ustedes
queridos amigos.
Las estaciones son páramos
que pertenecen al alma,
son cuerdas de un reloj
que el tiempo se apodera...
con estrofas de su magna geografía.
Primaveras, estíos, marcando las horas
en cada paso inexorable,
en la huella de una rama
que se extingue entre los vientos.
Calles sembradas por otoños
donde crecen las granadas y las rosas
indagando el cándido dibujo
de unas manos.
Tanto gris en el breviario de los días;
trémulos miedos que el invierno
aleja en mantos de perfume
cuando los mirlos en un solo trino
ocupan su barca en la distancia.
Las estaciones galanas
son estados del alma,
hacen deslumbrante el vacío de la lluvia
y dispersan la alborada
del polvoriento desván de la memoria.
Luján 2013