NARRAR...
El viejo recurso imperecedero. El de los escritores que cuentan historias y que no escriben buscando la gloria literaria. Es de aquellos que sólo intentan mantenernos entretenidos, que sólo pretenden que disfrutemos con la lectura de una novela, aquellos que no nos permiten olvidar el mundo perdido de tantas cosas queridas.
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A veces pienso en el tiempo que pasa tan rápido y en los sueños que hay que perseguir hasta que nos den las fuerzas... y más, pero también es hermoso haber conocido en esta vida una vocación que no es otra cosa que la pasión por algo.
Esa misma vocación es la que te salva en los momentos difíciles, una herramienta para que puedas sobrellevar las angustia tratando de sobrevivir y aceptando aquello que no se puede cambiar.
Ya lo dijo ERNESTO SÁBATO en su libro ANTES DEL FIN:
No hay nadie que jamás haya escrito, pintado, esculpido, modelado, construido, inventado, a no ser para salir de su infierno."
"Sólo quienes sean capaces de encarnar la utopía
serán aptos para el combate decisivo,
el de recuperar cuanto de humanidad hayamos perdido".
E. Sábato