ENAMORAMIENTO:
Caracterizado por la intensa atracción, la idealización y el desconocimiento, que alientan fantasías e ilusiones apasionadas.
ACEPTACIÓN:
A medida que cada uno empieza a manifestar sus características REALES y éstas se imponen a las IDEALES, se le presenta al otro el desafío de la aceptación.
REELECCIÓN:
Si se atraviesa el ciclo de la aceptación, habrá llegado el momento de echar una nueva mirada al otro y plantearnos si volveríamos a elegirlo.
AFIANZAMIENTO:
Una vez que, aceptándose, los miembros de la pareja se reeligen, continúa una etapa de afianzamiento, en la que los contenidos afectivos se traducen en realizaciones.
PLENITUD AMOROSA:
Los integrantes de la pareja ha aprendido que son diferentes y saben cómo hacer de esas diferencias un potencial de CRECIMIENTO. Ahora saben para qué están juntos y se han convertido en el mejor maestro del otro.
"El verdadero amor nace del desapego.
LA DEPENDENCIA NO ES AMOR.
Hay que saber que el desapego no es indiferencia,
sino comprometida atención
que elude la fusión.
No hay que confundir amor con confluencia.
EL AMOR
es, en definitiva,
el fruto de un inteligente proceso de mutuo conocimiento,
de mutua transformación
y de mutua aceptación.
Primero conocer, luego trabajar en lo que es conflictivo
y por fin aceptar al otro
como alguien que es otro,
no una copia de mí o de mis expectativas.
Estos pasos sucesivos son un signo inconfundible
DE INTELIGENCIA AMOROSA."
S.Sinay
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